Las sanciones impuestas a Addameer tienen graves consecuencias para el trabajo en favor de los derechos humanos en Israel/Palestina y más allá
La decisión tomada el 10 de junio por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC, por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos de sancionar a Addameer, una destacada organización palestina de derechos humanos, es un ejemplo lamentable de la represión que sufren los defensores y defensoras de los derechos humanos palestinos y pro palestinos y las voces que los apoyan en Estados Unidos y otras partes del mundo. Esta decisión arbitraria y sin fundamento debe ser revocada de inmediato, han declarado Amnistía Internacional y Human Rights Watch cuando se cumple un mes de la decisión.
Ambas organizaciones han colaborado estrechamente con Addameer durante décadas. Estados Unidos impuso las sanciones basándose en la afirmación de que Addameer está afiliada al Frente Popular para la Liberación de Palestina, que el Gobierno estadounidense ha designado como “organización terrorista”, a pesar de no haber aportado pruebas que lo corroboren.
Según las organizaciones, Estados Unidos está utilizando su régimen de sanciones para satisfacer los deseos del gobierno israelí, que lleva mucho tiempo tratando de silenciar sistemáticamente el trabajo de denuncia e incidencia en materia de derechos humanos.
Es indignante que, en lugar de presionar a Israel para que ponga fin a los crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad y actos de genocidio que está cometiendo contra la población palestina, Estados Unidos esté tomando medidas draconianas contra quienes defienden los derechos humanos, castigando las voces que se oponen al genocidio, la ocupación y el apartheid, y uniéndose así al ataque de Israel contra el movimiento internacional de derechos humanos, añadieron las organizaciones.
En 2021 las autoridades israelíes prohibieron Addameer, junto con otros cinco grupos palestinos de derechos humanos y de la sociedad civil, calificándolos de organizaciones “terroristas” e “ilegales” basándose en acusaciones similares de afiliación, y en agosto de 2022 registraron sus oficinas. Sin embargo, Israel no ha presentado ninguna prueba creíble que respalde estas acusaciones. Gran parte de la comunidad internacional, incluidos muchos Estados europeos, rechazó las acusaciones por considerarlas infundadas.
Addameer representa a las personas palestinas detenidas y presas bajo custodia de Israel y la Autoridad Palestina y defiende sus derechos. Las sanciones estadounidenses se imponen en un momento en que las autoridades israelíes mantienen a más de 3.000 personas palestinas en situación de detención administrativa, sin cargos ni juicio, e infligen tortura contra personas palestinas bajo custodia, incluida la violencia sexual y la negación de alimentación adecuada, atención médica y acceso a observadores internacionales, como el Comité Internacional de la Cruz Roja. En muchos de estos casos, Addameer ha prestado asistencia jurídica gratuita a las personas palestinas detenidas, a pesar de que las autoridades israelíes han intensificado el uso de la tortura y otros malos tratos hasta alcanzar niveles espantosos. Según las organizaciones de presos palestinos, más de 72 personas palestinas han muerto bajo custodia israelí desde el 7 de octubre de 2023.
Según afirmaron las organizaciones, la medida sienta un precedente peligroso, al utilizar las sanciones como herramienta para castigar a los defensores y defensoras de los derechos humanos que denuncian los abusos cometidos por países aliados de Estados Unidos.
Las sanciones estadounidenses tienen consecuencias catastróficas para Addameer, la población palestina que depende de su esencial labor y la sociedad civil palestina en general. Las sanciones dificultarán cada vez más sus operaciones cotidianas, también para su personal, las comunidades a las que proporciona asistencia y los proveedores de servicios. También afectarán negativamente a su colaboración con sus organizaciones socias, tanto a nivel local como internacional, incluidos los grupos con sede en Estados Unidos.
El efecto intimidatorio de esta decisión sobre la defensa de los derechos humanos frente a las violaciones de los derechos de la población palestina por parte de Israel es innegable, en un momento en que su labor es más necesaria que nunca, ya que Israel ha intensificado gravemente sus crímenes internacionales contra la población palestina en el Territorio Palestino Ocupado, afirmaron las organizaciones.
La OFAC debería revocar inmediatamente su decisión arbitraria y sin fundamento de imponer sanciones a Addameer.
Los defensores y defensoras de los derechos humanos y quienes expresan su apoyo y solidaridad para con las personas palestinas deben ser protegidos, no proscritos ni silenciados, añadieron las organizaciones.
Tags: ACTIVISTAS Y DEFENSORES DE LOS DERECHOS HUMANOS, AMÉRICA DEL NORTE, ISRAEL Y EL TERRITORIO PALESTINO OCUPADO.
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