Viernes, 02 de febrero, 2024
Con antelación a la esperada sentencia en apelación dictada el miércoles 31 de enero de 2024 en el caso del activista bidun kuwaití Mohammad al Bargash, procesado por hablar de los derechos humanos de la población bidun (apátrida) de Kuwait, Aya Majzoub, directora regional adjunta de Amnistía Internacional para Oriente Medio y Norte de África, ha manifestado:
“Durante más de tres años, Mohammad al Bargash ha sido uno de los más firmes defensores de los derechos humanos de los bidun en Kuwait. Es escandaloso que las autoridades kuwaitíes castiguen a Al Bargash sólo por intentar espolear la conciencia del gobierno y la población de Kuwait y lograr el respeto del derecho de la población bidun a un trato igualitario en su propio país.
Este enjuiciamiento transmite un mensaje intimidatorio a todos los que se atreven a ejercer su derecho a la libertad de expresión sobre la situación de los bidun. El procesamiento de Al Bargash por hablar sobre la situación de los apátridas de Kuwait es injusto y nunca tenía que haber sucedido. Las autoridades deben anular todos los cargos en su contra y poner fin a las persistentes prácticas discriminatorias contra la comunidad bidun.
Es escandaloso que las autoridades kuwaitíes castiguen a Al Bargash sólo por intentar espolear la conciencia del gobierno y la población de Kuwait y lograr el respeto del derecho de la población bidun a un trato igualitario en su propio país.
Aya Majzoub, directora regional adjunta de Amnistía Internacional para Oriente Medio y Norte de África
No es la primera vez que las autoridades kuwaitíes intentan encarcelar a activistas de los derechos de la población bidun, ni el primer caso de actuaciones judiciales contra Al Bargash. Ya es hora de que las autoridades kuwaitíes pongan fin a esta farsa y reconozcan a las personas bidun apátridas sus derechos a la nacionalidad, la educación y la asistencia médica.”
Información complementaria
El 3 de septiembre de 2023, agentes de la Agencia de Seguridad del Estado vestidos de civil detuvieron a Mohammad al Bargash sin una orden judicial en su lugar de trabajo, una tienda de electrónica en el barrio de Al Sulaibiya de la gobernación de Jahra.
Está acusado de “difundir rumores y noticias falsas en el extranjero” que podrían “socavar el prestigio y la posición del país” tras su aparición en una entrevista con Nabaa TV, canal de la oposición saudí que emite desde Líbano, para debatir la situación de la comunidad bidun.
Pasó más de siete semanas en prisión y quedó finalmente en libertad cuando un juzgado de primera instancia lo absolvió el 25 de octubre de 2023. La acusación recurrió el fallo, y el tribunal de apelación tiene previsto dictar sentencia el próximo miércoles 31 de enero.
Anteriormente había sido juzgado por participar en una manifestación pacífica en favor de los derechos de los apátridas en el barrio bidun de Taima el 26 de agosto de 2022. En ese caso se impusieron multas a las 21 personas acusadas; Al Bargash fue condenado a pagar 200 dinares (unos 650 dólares estadounidenses) y recibió una condena condicional de un año de prisión. Se enfrenta a entre 3 y 15 años de prisión por los cargos actuales, con posibilidad de una condena aún más larga debido al fallo condenatorio anterior.
Los bidun, que suman alrededor de 100.000 personas, son una comunidad apátrida de Kuwait. El gobierno kuwaití niega a los niños y niñas bidun el acceso a la escuela pública gratuita a la que asisten los kuwaitíes y no presta asistencia médica a los bidun en términos de igualdad con los nacionales kuwaitíes.
La discriminación sistemática de las personas bidun viola las obligaciones jurídicas de Kuwait con arreglo a varios tratados internacionales, como la Convención Internacional sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Racial, la Convención sobre los Derechos del Niño y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales.