Lunes, 09 de junio, 2025

En respuesta a los nuevos cargos presentados contra el activista hongkonés encarcelado Joshua Wong por “conspiración para actuar en connivencia con fuerzas extranjeras” en virtud de la Ley de Seguridad Nacional de la ciudad, la directora de Amnistía Internacional para China, Sarah Brooks, ha declarado:

“La Ley de Seguridad Nacional de Hong Kong cumple cinco años a finales de este mes, y los nuevos cargos interpuestos contra Joshua Wong demuestran que, en el presente, el texto se sigue prestando a ser utilizado por las autoridades de Hong Kong para amenazar los derechos humanos en la ciudad con la misma potencia de siempre.”

“Una vez más, se vuelve a utilizar el delito amplio e impreciso de ‘actuación en connivencia con fuerzas extranjeras’ para justificar un ataque contra las libertades de expresión y asociación.”

“Wong, que ya estaba en la cárcel por participar en unas primarias no oficiales, habría salido en libertad dentro de un año y medio. Pero si la causa sigue adelante, podría enfrentarse a una pena de hasta cadena perpetua.”

“La interposición de este cargo contra él pone de relieve el temor de las autoridades hacia los disidentes destacados y demuestra hasta dónde están dispuestas a llegar para mantenerlos encarcelados el mayor tiempo posible, y seguir así disuadiendo el activismo de la sociedad civil en la ciudad. El gobierno de Hong Kong debe retirar estos cargos y dejar de aplicar la Ley de Seguridad Nacional de inmediato, tal y como han pedido varios organismos de las Naciones Unidas. Todas las personas encarceladas simplemente por ejercer sus derechos humanos deben quedar en libertad.»

Información complementaria

Joshua Wong fue acusado el viernes de conspirar para actuar en connivencia con fuerzas extranjeras en virtud de la Ley de Seguridad Nacional impuesta por Pekín en Hong Kong.

El destacado activista, que fue una de las 45 figuras de la oposición encarceladas el año pasado en virtud de la Ley de Seguridad Nacional por participar en unas “primarias” no oficiales celebradas en 2020, se enfrentó el viernes en los tribunales a un nuevo delito contra la seguridad nacional.

Según los informes, Wong está acusado de conspirar con el activista autoexiliado Nathan Law y “otras personas desconocidas” entre julio y noviembre de 2020 para solicitar a países u organizaciones extranjeros que impusieran sanciones y bloqueos o emprendieran otras actividades hostiles contra Hong Kong o China. El nuevo cargo conlleva una posible pena de cadena perpetua.

Wong había sido condenado anteriormente a cuatro años y ocho meses de prisión por “conspiración para cometer subversión” en el mayor proceso judicial de Hong Kong en virtud de la Ley de Seguridad Nacional.

La situación de los derechos humanos en Hong Kong se ha deteriorado drásticamente desde 2020, y más de 300 personas han sido detenidas por infringir la Ley de Seguridad Nacional, impuesta por Pekín, o una ley de “sedición” de la época colonial. Además, la iniciativa legislativa sobre el artículo 23 aprobada el año pasado por las autoridades territoriales/locales ha agravado aún más la represión y silenciado las voces de la oposición en la ciudad.