La sociedad civil, los sindicatos y los defensores y defensoras de los derechos humanos han dedicado años a lograr que la legislación digital de la UE proteja a la gente contra las amenazas digitales y los sistemas injustos de inteligencia artificial, y al mismo tiempo salvaguarde los datos de la población y haga que gobiernos y empresas rindan cuentas por el uso indebido de las tecnologías. Estas medidas son fundamentales para tener una sociedad digitalmente segura

En respuesta a las propuestas de la Comisión Europea sobre el denominado “reglamento ómnibus digital”, que  desmantelará las protecciones del bloque contra las amenazas digitales, Damini Satija, directora de programa en Amnesty Tech, ha declarado: 

“El actual giro desregulador de la UE debilitará los derechos de las personas y las expondrá a opresión digital. Abrirá la puerta a la vigilancia ilegal, al establecimiento de perfiles discriminatorios en los sistemas de bienestar social y en la labor policial, a la privación del derecho de las personas a tener control de sus datos personales y oponerse a decisiones automatizadas, y a la difusión de contenido online nocivo. También dificultará la detección e impugnación de las decisiones tomadas por sistemas automatizados sobre quién puede acceder a prestaciones sociales, empleos y oportunidades educativas, al tiempo que agravará aún más el daño ambiental generado por políticas que priorizan al sector tecnológico”.

“La sociedad civil, los sindicatos y los defensores y defensoras de los derechos humanos han dedicado años a lograr que la legislación digital de la UE proteja a la gente contra las amenazas digitales y los sistemas injustos de inteligencia artificial, y al mismo tiempo salvaguarde los datos de la población y haga que gobiernos y empresas rindan cuentas por el uso indebido de las tecnologías. Estas medidas son fundamentales para tener una sociedad digitalmente segura.”

“Algunas de estas leyes, que tanto ha constado conseguir, aún no han entrado siquiera en vigor, pero la UE ya está tratando de modificar el equilibrio de poder, pasándolo de las protecciones individuales a la impunidad empresarial, y cediendo a los intereses lucrativos de los gigantes tecnológicos que a menudo operan a costa de nuestros derechos.  

La sociedad civil, los sindicatos y los defensores y defensoras de los derechos humanos han dedicado años a lograr que la legislación digital de la UE proteja a la gente contra las amenazas digitales y los sistemas injustos de inteligencia artificial, y al mismo tiempo salvaguarde los datos de la población y haga que gobiernos y empresas rindan cuentas por el uso indebido de las tecnologías. Estas medidas son fundamentales para tener una sociedad digitalmente segura.   

Damini Satija, directora de programa en Amnesty Tech

“Si la UE quiere realmente apoyar la implementación sin trabas de la legislación digital, como por ejemplo la ley sobre inteligencia artificial, el reglamento general de protección de datos y otras protecciones fundamentales, debe reforzar las salvaguardias existentes y garantizar que las leyes se aplican de manera que tengan sentido, no desmantelar los marcos que actualmente hacen rendir cuentas a las empresas y permiten avanzar hacia un futuro tecnológico que respete los derechos.”

Información complementaria

El reglamento ómnibus digital forma parte de una iniciativa más amplia de desregulación por parte de la UE, sobre la que la sociedad civil ha dado la voz de alarma.