Lunes, 05 de junio, 2017
Licón, Yaridbell

Fue histórico que 150 países hayan ratificado el Acuerdo de París, incluyendo EE.UU., el segundo mayor emisor de gases de efecto invernadero después de China, según la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente. Sin embargo, la semana pasada el presidente, Donald Trump, retiró a Estados Unidos del Acuerdo de París. Ante lamentable medida, Margaret Huang, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Estados Unidos, ha declaró que “Al negarse a unirse a otras naciones a la hora de tomar las medidas necesarias para reducir las emisiones de gas de efecto invernadero y atenuar el cambio climático, el presidente está diciendo, en la práctica: ‘Que se ahoguen, se quemen y mueran de hambre’”. 


Priorizar negocios, industrias, fábricas y demás sectores que afectan directamente al ambiente es una amenaza a muerte que muchos Estados no visualizan, pues el cambio climático tiene graves efectos sobre los derechos humanos. De hecho, de no tomar medidas, el cambio climático podría causar la muerte de millones de personas al deteriorar seriamente el medio y todo su entorno.

Por primera vez, en noviembre de 2016, entró en vigor un acuerdo donde casi todos los países se comprometían con el mundo para fortalecer la respuesta a la amenaza del cambio climático al mantener el aumento de la temperatura mundial por debajo de 2 ºC y, teniendo en cuenta los graves riesgos que entraña, esforzarse por lograr que no sea superior a 1,5 ºC. 

Fue histórico que 150 países hayan ratificado el Acuerdo de París, incluyendo EE.UU., el segundo mayor emisor de gases de efecto invernadero después de China, según la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente. Sin embargo, la semana pasada el presidente, Donald Trump, retiró a Estados Unidos del Acuerdo de París. Ante lamentable medida, Margaret Huang, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Estados Unidos, ha declaró que “Al negarse a unirse a otras naciones a la hora de tomar las medidas necesarias para reducir las emisiones de gas de efecto invernadero y atenuar el cambio climático, el presidente está diciendo, en la práctica: ‘Que se ahoguen, se quemen y mueran de hambre’”. 

China, Estados Unidos y Canadá deben asumir un mayor compromiso

Según la Base de Datos de Emisiones para la Investigación Atmosférica Global, en la actualidad, China es el país que más contamina, con 10,64 kilotones de CO2 emitidos a la atmósfera, seguido de Estados Unidos con 5,17. “No obstante, el cálculo por persona refleja que en USA  es donde se realizan más emisiones de este gas de efecto invernadero”.

Otro dato que genera la base indica que en los últimos 50 años, Canadá y Estados Unidos han encabezado el consumo de electricidad por persona a nivel mundial. Sin embargo, “al sumar todas las contribuciones de contaminantes al planeta, los cálculos indican que Estados Unidos es el que más contribuye al calentamiento que se ha registrado hasta el momento, con 0,151°C.”

Ante lamentables cifras y preocupante medida de Trump, Amnistía Internacional reafirma que el cambio climático es una de las amenazas más generalizadas para las sociedades humanas que el mundo ha experimentado. “También es una amenaza que puede salirse de control de forma rápida e irreversible. A medida que los glaciares se fundan, los lagos y ríos se sequen, los bosques se quemen, las cosechas mueran y las olas de calor nos azoten, el impacto sobre los derechos humanos será devastador. Es un problema que puede agudizar aún más la desigualdad social, la hambruna y la crisis de refugiados. A cientos de millones de personas se les negaría su derecho a la vida, la salud, el alimento, el agua y la vivienda. Entre quienes más sufrirán las consecuencias se encuentran quienes están en situaciones vulnerables en todos los continentes, especialmente los niños y niñas.”

Principales impactos del cambio climático en América Latina para los derechos humanos

La Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente presentó a través de un informe los hechos claves relacionados con el impacto del cambio climático en el disfrute de los derechos humanos:

  • Pérdida de los recursos de agua dulce y sequías:

- Los glaciares tropicales se han reducido dramáticamente desde los años 70 en una tendencia que está directamente relacionada con el aumento de las temperaturas. Los científicos especializados en el clima predicen que para el año 2050, más de 50 millones de personas en la región de los Andes tropicales se verán afectadas durante las temporadas secas por la pérdida de agua para la irrigación, el saneamiento y la energía hidroeléctrica. 

- Se ha experimentado un aumento considerable en la intensidad de las sequías desde la década de los 70, a excepción de la región del Cono Sur que se ha hecho considerablemente más húmeda. Los científicos estiman que para el 2025, hasta 77 millones de personas más en América Latina experimentarán estrés hídrico debido al cambio climático.

  • Tormentas extremas e inundaciones:

- Se han vuelto más frecuentes las fuertes lluvias, incluso en lugares donde ha disminuido la precipitación anual y América Latina ha experimentado recientemente inusuales inundaciones extremas. Por ejemplo, en 2008 más de 300.000 personas quedaron sin hogar en Brasil por dos grandes inundaciones en un mismo período de seis meses. Adicionalmente, en 2010 Colombia sufrió las más devastadoras inundaciones en cuarenta años, que afectaron a más de 2,2 millones de personas y costaron al país más de $300 millones de dólares en ayuda de emergencia.

-  Los huracanes más fuertes en la región del Atlántico Norte han aumentado en intensidad desde 1970, lo cual está asociado a un patrón de aumento en la temperatura de la superficie del mar. En América Central, México y el Caribe millones de personas viven en las trayectorias de los huracanes que son cada vez más fuertes. Allí desde 1970, cada año, un promedio de 1.300 personas han muerto y 70.000 se han quedado sin hogar por las tormentas, los deslizamientos de tierra o las inundaciones.

  • Aumento del nivel del mar y destrucción de los ecosistemas marinos:

 - Desde 1960, el cambio climático ha provocado un aumento del nivel del mar a un ritmo cada vez mayor, superando las proyecciones científicas (el rango de las estimaciones actuales es de 0,6 a 1,9 metros en 2100). Las comunidades costeras como los indígenas Kuna de las islas de San Blas de Panamá, ya están sintiendo los impactos. Si el nivel del mar aumenta 1,5 m –que según las proyecciones científicas es lo que ocurriría si no hay esfuerzos serios de mitigación a corto plazo– podría desplazar a millones de personas en la región, incluyendo el 90% de la población de Guyana.

- El calentamiento de la temperatura de los océanos es la causa más probable de la disminución precipitada de algas marinas que son la base de los ecosistemas oceánicos. Los factores asociados al cambio climático, incluyendo el aumento de las tormentas marinas, el calentamiento de la temperatura del agua y la acidificación del océano, probablemente han contribuido a la destrucción de más del 80% de los arrecifes de coral del Caribe que proveen importantes criaderos para peces. Los peces silvestres constituyen el 84% de las especies de América Latina y la pérdida significativa de las poblaciones de peces afectaría la seguridad alimentaria, la nutrición y los medios de subsistencia

  • Aumento de los incendios forestales:

- Las sequías asociadas con el cambio climático han provocado incendios más frecuentes, intensos y mortales desde 1980. Durante los años 90, muchos incendios asolaron bosques que nunca habían sido objeto de quemas anteriormente, incluyendo los bosques tropicales de Brasil y el bosque nublado de México. Científicos del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) temen que el cambio climático llevará a una catastrófica muerte regresiva de los bosques amazónicos, lo que fundamentalmente alteraría los patrones locales de precipitación y de la biodiversidad y tendría un impacto negativo en los medios de vida tradicionales y las culturas.

  • Calor y enfermedades de transmisión por vectores:

- El cambio climático provoca impactos sobre la salud humana a través de múltiples vías. El aumento de las inundaciones y las temperaturas más altas contribuyen a la propagación de diarreas y de enfermedades transmitidas por vectores. Un estudio calcula que para el año 2030, América Latina puede experimentar un crecimiento de hasta el 28% en el riesgo de malaria debido al cambio climático.

- Los días calientes, las noches calurosas y las olas de calor van en aumento y son la causa de muertes relacionadas con calor. Las temperaturas más altas del aire también exacerban el ozono a nivel del suelo y la contaminación de smog, contribuyendo a la generación de enfermedades respiratorias. Esto puede ser especialmente preocupante en muchas grandes ciudades, como la Ciudad de México y Santiago de Chile, que están ubicadas en valles, sujetas a inversiones térmicas que atrapan los contaminantes tóxicos del aire.

 

 

¿Cómo se pueden proteger los derechos humanos ante el cambio climático?

 Según la Asociación Interamericana para la Defensa del Ambiente es importante considerar que:

  • Los Estados deberían cooperar para crear compromisos internacionales vinculantes, efectivos y equitativos para prevenir más contribuciones al cambio climático global.
  • Todos los Estados deben trabajar, en la mayor medida posible, para reducir las contribuciones causadas por los humanos al cambio climático global.
  • Revisar las actuales políticas de energía para incluir más fuentes de energía renovables.
  •  Los Estados que han contribuido histórica y/o actualmente más al cambio climático mundial, deben de contribuir más en la búsqueda de soluciones duraderas.
  •  Realizar varios análisis completos del riesgo de los posibles impactos del cambio climá- tico a los derechos humanos e incorporar una perspectiva de derechos humanos en los planes de mitigación y adaptación.
  • Asegurar la participación activa de actores interesados y acceso a la información cuando se tomen medidas de mitigación y adaptación.
  • Priorizar la adaptación y la mitigación de medidas que protejan a los ecosistemas frágiles, tales como manglares, glaciares y páramos, que ayudan a reducir los impactos del cambio climático.
  • Tomar medidas para mejorar el acceso a la información respecto a los impactos adversos del cambio climático y las probables implicaciones para los derechos humanos, especialmente para las comunidades vulnerables.
  • Requerir que todos los grandes proyectos de desarrollo incluyan evaluaciones del cambio climático como parte de una evaluación de impacto completa, previa e independiente.

Día Mundial de Medio Ambiente

Hoy, Día Mundial del Medio Ambiente, es una oportunidad para que los Estados se comprometan de manera definitiva en sumar sus esfuerzos para contribuir con la no contaminación y así prevenir catástrofes ambientales y humanas; asimismo, es importante que garanticen el cumplimiento de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible donde se determina “garantizar una protección duradera del planeta y sus recursos naturales”. “En concreto, los objetivos 14 y 15 se centran en la conservación de los ecosistemas marinos y terrestres, así como en el uso sostenible de estos recursos”.