Jueves, 12 de julio, 2018
Romero, Victoria

Amal Fathy es una activista egipcia cuya labor se centra fundamentalmente en la democratización de Egipto. Ha protestado enérgicamente contra las violaciones de los derechos humanos en Egipto, en especial por la detención arbitraria de activistas.


Amal Fathy es una defensora egipcia de derechos humanos que ha sido arrestada injustamente por hablar del acoso sexual en Facebook.

Amal tiene dos casos abiertos contra ella: “publicar un vídeo que contiene noticias falsas que podrían menoscabar la paz pública” y la presunta relación con el Movimiento Juvenil 6 de abril. El 26 de junio un juez ordenó la libertad bajo fianza de Amal en el primero de los casos, sin embargo, ella continúa en prisión. El desarrollo de los hechos ha demostrado que esta activista es una presa de conciencia.

Esta defensora egipcia de derechos humanos, de 33 años, trabajó en el pasado como actriz y asistente de dirección de cine, así como también de modelo. Su marido, Mohamed Lofti, también es un conocido defensor de derechos humanos.

"Amal Fathy criticó al gobierno egipcio por no proteger a las mujeres y su detención ha demostrado precisamente lo pertinente que es su preocupación"

Najia Bounaim, directora de Campañas de Amnistía Internacional para el Norte de África

 

El 9 de mayo, Amal publicó un vídeo en su página de Facebook, en el que hablaba sobre lo frecuente que es el acoso sexual en Egipto y criticaba su falta de protección por parte de las autoridades. La activista también criticaba al gobierno por el deterioro de los derechos humanos, las condiciones socioeconómicas y los servicios públicos.

Posteriormente, medios de comunicación progubernamentales la acusaron de insultar a Egipto y a sus instituciones desatando una oleada de hostigamiento y amenazas contra la activista en las redes sociales a consecuencia del vídeo, con insultos  sexistas y peticiones de encarcelamiento. Dos días después, fue detenida.

Amnistía Internacional ha detallado minuciosamente el vídeo y no ha encontrado declaraciones que no estén amparadas por el derecho a la libertad de expresión.

El pasado 2 de julio de 2018, el fiscal de seguridad del estado renovó la detención de Amal por 15 días más. Amal mostró síntomas de estrés agudo y no pudo caminar por sí misma. El médico de la prisión la diagnosticó con una etapa temprana de parálisis en la pierna izquierda y solicitó que la remitieran a un psiquiatra.
 
La próxima sesión será el 15 de julio, donde podría ser liberada en 2-3 meses pero sólo la presión internacional puede cambiar esto y lograr su liberación, por lo que la movilización urgente para presionar a las autoridades egipcias es clave.
 

Necesitamos de tu FIRMA para que conjunto con los demás activistas de Amnistía Internacional logremos hacer justicia para Amal y las mujeres en Egipto.