Martes, 24 de abril, 2018

El preso de conciencia de etnia kachin Lahpai Gam quedó en libertad el 17 de abril de 2018 gracias a una amnistía presidencial. Detenido desde junio de 2012, Lahpai Gam fue torturado durante el interrogatorio y acusado falsamente de pertenecer a una asociación “ilícita”. Lahpai Gam tiene problemas de salud, que empeoraron mientras estuvo detenido


Lahpai Gam salió en libertad incondicional de la cárcel de Myitkyina, en el estado myanmaro de Kachin, el 17 de abril de 2018, gracias a una amnistía presidencial de la que se beneficiaron 8.490 presos, algunos de ellos presos de conciencia y personas detenidas arbitrariamente.

Lahpai Gam fue detenido en junio de 2012 en el estado de Kachin, en el norte de Myanmar. Lo mantuvieron en régimen de incomunicación durante casi un mes antes de trasladarlo a la cárcel de Myitkyina, y fue torturado por el ejército en el interrogatorio. Acusado falsamente de pertenecer al Ejército Independentista Kachin, grupo étnico armado de Myanmar, y de participar en la colocación de explosivos en un puente del estado de Kachin, fue condenado a 20 años de cárcel. Sin embargo, al no haber suficientes pruebas, el Tribunal Supremo revocó las penas dictadas en aplicación de la Ley de Asociaciones Ilícitas y dos de los cuatro cargos presentados en virtud de la Ley de Sustancias Explosivas. Los dos cargos restantes se mantuvieron basándose en una carta de confesión de la época en que el preso fue torturado y estaba incomunicado

Mientras estuvo en la cárcel, Lahpai Gam mantuvo que era inocente, y Amnistía Internacional cree que la causa seguida contra él tuvo motivación política. En noviembre de 2013, el Grupo de Trabajo de la ONU sobre la Detención Arbitraria declaró que el arresto y la reclusión de Lahpai Gam eran arbitrarios, basándose en que restringían sus derechos a la libertad de circulación y residencia, a la libertad de pensamiento y conciencia y a la libertad de expresión y opinión, además de violar el principio de no discriminación.

Si bien para la organización es motivo de satisfacción que Lahpai Gam haya quedado en libertad, no deja de ser cierto que nunca debería haber sido detenido y encarcelado.

Lahpai Gam salió en libertad incondicional de la cárcel de Myitkyina, en el estado myanmaro de Kachin, el 17 de abril de 2018, gracias a una amnistía presidencial de la que se beneficiaron 8.490 presos, algunos de ellos presos de conciencia y personas detenidas arbitrariamente.

Lahpai Gam fue detenido en junio de 2012 en el estado de Kachin, en el norte de Myanmar. Lo mantuvieron en régimen de incomunicación durante casi un mes antes de trasladarlo a la cárcel de Myitkyina, y fue torturado por el ejército en el interrogatorio. Acusado falsamente de pertenecer al Ejército Independentista Kachin, grupo étnico armado de Myanmar, y de participar en la colocación de explosivos en un puente del estado de Kachin, fue condenado a 20 años de cárcel. Sin embargo, al no haber suficientes pruebas, el Tribunal Supremo revocó las penas dictadas en aplicación de la Ley de Asociaciones Ilícitas y dos de los cuatro cargos presentados en virtud de la Ley de Sustancias Explosivas. Los dos cargos restantes se mantuvieron basándose en una carta de confesión de la época en que el preso fue torturado y estaba incomunicado

Mientras estuvo en la cárcel, Lahpai Gam mantuvo que era inocente, y Amnistía Internacional cree que la causa seguida contra él tuvo motivación política. En noviembre de 2013, el Grupo de Trabajo de la ONU sobre la Detención Arbitraria declaró que el arresto y la reclusión de Lahpai Gam eran arbitrarios, basándose en que restringían sus derechos a la libertad de circulación y residencia, a la libertad de pensamiento y conciencia y a la libertad de expresión y opinión, además de violar el principio de no discriminación.

Si bien para la organización es motivo de satisfacción que Lahpai Gam haya quedado en libertad, no deja de ser cierto que nunca debería haber sido detenido y encarcelado.

Índice: ASA 16/8254/2018