Martes, 21 de agosto, 2018

El estado estadounidense de Nebraska llevó a cabo el 14 de agosto su primera ejecución en 21 años, y la primera por inyección letal. El preso, Carey Dean Moore, de 60 años, llevaba casi cuatro decenios en el corredor de la muerte. No había pedido clemencia y había renunciado a sus apelaciones


Ésta ha sido la primera ejecución que se lleva a cabo en Nebraska desde diciembre de 1997, y la primera por inyección letal. La ejecución se llevó a cabo el 14 de agosto, pero hubo recursos judiciales de última hora relativos a las sustancias utilizadas en la inyección letal. Fresenius Kabi USA, fabricante de dos de las cuatro sustancias (el besilato de cisatracurio y el cloruro de potasio) que el Departamento de Prisiones de Nebraska planeaba utilizar, presentó el 7 de agosto una demanda en el tribunal federal de primera instancia para pedir una orden de restricción temporal con el fin de suspender la ejecución en nombre de la empresa. Fresenius Kabi declaró que, aunque “no adopta ninguna postura sobre la pena capital”, se opone al uso de sus productos para este propósito y, por tanto, no vende determinadas sustancias a centros penitenciarios.

El 10 de agosto, el juez del tribunal federal de primera instancia denegó la emisión de una orden de restricción temporal. El juez declaró que no se había demostrado que las sustancias en posesión del Departamento de Prisiones hubieran sido fabricadas por Fresenius Kabi, y que la alegación de que la reputación de la empresa se vería perjudicada era “especulativa”. Por otra parte, declaró que el estado sufriría un “daño grande e irreparable” si concedía la orden de restricción, habida cuenta del elemento de “interés público”. Subrayó el hecho de que, en las elecciones de noviembre de 2016, se preguntó a los votantes de Nebraska si querían derogar o mantener una ley aprobada por la Cámara de Representantes en 2015 que abolía la pena de muerte. El electorado votó a favor de reinstaurar la pena de muerte. El juez concluyó que “cualquier demora ahora equivale a anular la ley de Nebraska, especialmente dada la rapidez con que se aproxima la fecha de caducidad de dos de las sustancias y la total ausencia de cualquier alternativa factible”. El 13 de agosto, la Corte de Apelaciones del Octavo Circuito, corte federal, denegó anular la decisión.

Para la ejecución se utilizaron, en este orden, diazepam, citrato de fentanilo, besilato de cisatracurio y cloruro de potasio. El Departamento de Prisiones de Nebraska dijo que la primera de las sustancias se inyectó a las 10.24 de la mañana, y la muerte de Carey Dean Moore se certificó 23 minutos después, a las 10.47 de la mañana. Un periodista de Associated Press informó de que, en tres ocasiones, durante el proceso de inyección letal, los funcionarios de prisiones cerraron una cortina para impedir que los testigos vieran partes de la ejecución.

Amnistía Internacional se opone a la pena de muerte incondicionalmente, independientemente del delito o del método de ejecución elegido por el estado. En Estados Unidos se han llevado a cabo 1.481 ejecuciones desde que, en 1976, la Corte Suprema de Estados Unidos confirmó los nuevos estatutos de pena capital. En lo que va de año ha habido 16 ejecuciones en Estados Unidos.

Nuestro agradecimiento a quienes enviaron llamamientos. No se requiere ninguna otra acción por parte de la Red de Acción Urgente.

Índice: AMR 51/8968/2018