Lunes, 18 de septiembre, 2017
Ramos, Jorgen

El reconocimiento de que las y los líderes escolares son significativos a la hora de elevar la calidad de la enseñanza y el aprendizaje de los estudiantes ha conducido a la necesidad de diseñar estrategias destinadas al fortalecimiento de su desempeño


El liderazgo directivo se ha venido constituyendo en un tema de creciente importancia dentro de la discusión educativa a nivel internacional. La formación de directivas y directivos con liderazgos claros son claves para la operacionalización de las políticas educativas de cada Estado; que cada institución educativa cuente con un directivo que oriente su gerencia educacional al respeto de las leyes, incluyendo esencialmente la promoción y defensa de los derechos humanos potencia a la educación como eje fundamental de una sociedad orientada a la cultura de paz y desarrollo sustentable.

El reconocimiento de que las y los líderes escolares son significativos a la hora de elevar la calidad de la enseñanza y el aprendizaje de los estudiantes ha conducido a la necesidad de diseñar estrategias destinadas al fortalecimiento de su desempeño. De este modo, la formación y el desarrollo profesional continuo de los directores de escuela ha adquirido una posición central dentro de las políticas educativas dirigidas al liderazgo educativo. En esta área, las recomendaciones de política generadas desde organismos internacionales como la OCDE apuntan a la necesidad de entender al desarrollo directivo como una secuencia y la entrega de oportunidades de formación para distintos momentos de la carrera de los líderes, así como también al requerimiento de asegurar la calidad de la provisión existente y a la implementación de una variedad de oferta formativa con especial énfasis en metodologías experienciales que han sido probadas como efectivas (Pont et al., 2008).

 

América Latina y la formación de liderazgo educativo

América Latina está iniciando una nueva fase en materia de liderazgo directivo. Las iniciativas en curso son muy recientes, tienen menos de una década, y están centradas en los temas prioritarios de buscar potenciar la atracción del rol directivo (incentivos mediante), redefinir las responsabilidades y atribuciones directivas (fijación de estándares de desempeño con foco en lo pedagógico), y profesionalizar los procesos de selección y reclutamiento (combate del clientelismo y la discrecionalidad) (UNESCO OREALC, 2014; Weinstein y Hernández, 2014). Lo referido a formación constituye aún una asignatura pendiente, en que la cantidad de cursos y horas invertidos por los gobiernos y los propios directores no se condice con la irregular calidad de dichas acciones, ni tampoco con su falta de oportunidad y pertinencia (Avalos, 2011; Vaillant, 2011). Inevitablemente los sistemas escolares deberán buscar mejorar la oferta formativa hacia sus directivos, de manera de intentar que ella tenga un mayor efecto sobre sus prácticas y potencie su liderazgo ante las comunidades educativas que encabezan.

En este tránsito, se deberá cuidar de no replicar mecánicamente experiencias exitosas de otras latitudes, en que los directivos escolares no se ven enfrentados a los mismos desafíos educativos y socio-culturales que los latinoamericanos (Oplatka, 2004; Weinstein y Hernández, 2014). De ahí la importancia de describir y analizar estos 6 casos de programas innovadores que hoy se están desarrollando en distintos lugares de América Latina, los que, a pesar de su juventud, ya insinúan importantes aprendizajes sobre las nuevas fronteras de lo posible y deseable en cuanto a formación directiva.

Las políticas orientadas a la preparación y formación de los directivos escolares en América Latina y el Caribe enfrentan hoy el desafío de generar una oferta formativa de calidad capaz de potenciar el liderazgo dentro de los centros educativos. La formación que los países están impulsando hacia los responsables de conducir las escuelas suele ser abundante, invirtiendo tanto los gobiernos como los propios directivos recursos importantes en esta materia, pero su calidad es decididamente irregular y no suele cubrir los distintos momentos dentro de la carrera directiva ni los distintos contextos escolares, por lo que ha sido catalogada como de “cantidad sin calidad ni oportunidad”

 

Desafíos para una formación de calidad

El principal desafío en el área corresponde a la necesidad de que las autoridades educativas fomenten el desarrollo de una oferta educativa de calidad y pertinente para los directores de establecimientos escolares, para lo cual la generación de evidencia y de aprendizajes derivados de los programas de formación innovadores implementados en nuestra particular realidad latinoamericana es de especial interés. La necesidad de avanzar hacia investigaciones contextualizadas en esta materia aparece como particularmente clave ante los hallazgos de la aún incipiente literatura centrada en este tópico en países en desarrollo que ha detectado particularidades importantes en el rol de los directivos en sistemas escolares de estas características y ha formulado un fuerte llamado hacia la consideración del contexto socio-educativo en las estrategias orientadas a su potenciación (Oplatka, 2004).

Diversos estudios han dado cuenta de que aun cuando la oferta formativa en dichos países es amplia siendo otorgada por instituciones públicas o privadas, ésta no ha alcanzado los estándares necesarios para responder a las crecientes demandas y responsabilidades de los líderes escolares en los diversos momentos de su carrera, ni tampoco ha priorizado el foco en lo pedagógico o en metodologías de formación prácticas o experienciales.

Existen una serie de países en América Latina que desde años recientes vienen apostando por una formación estructurada, con currículos específicos para la formación del liderazgo directivo, así pues países como Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México y República Dominicana, vienen ejecutando programas, apoyados por algunas universidad, secretarias de educación y ministerios de educación. Si bien, como se mencionó anteriormente, deben cuidarse de replicar taxativamente estos programas en cada país, es importante analizar la ejecución que se ha desarrollado de los mismos, para encontrar puntos coincidentes en cada país y construir programas propios adaptados a su realidad social.

 

Fuentes Citadas:

  • http://www.unesco.org/new/es/santiago/resources/single-publication/news/liderazgo_escolar_en_america_latina_y_el_caribe_experienci/
  • http://unesdoc.unesco.org/images/0024/002440/244075s.pdf
  • Foto de YAKOBCHUK VIACHESLAV / shutterstock.com