Viernes, 03 de septiembre, 2021

Desde el asesinato de Natalia, periodistas, defensores y defensoras de los derechos humanos y activistas de la sociedad civil de Chechenia siguen siendo hostigados, intimidados, atacados, encarcelados por cargos falsos e incluso asesinados, como la defensora de los derechos humanos Zarema Sadulaeva junto con su esposo Alik Dzhabrailov


En una sentencia dictada hoy, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha fallado que las autoridades rusas no han investigado adecuadamente el asesinato de Natalia Estemirova, destacada defensora de los derechos humanos secuestrada y asesinada en Chechenia en 2009.

Denis Krivosheev, director de Amnistía Internacional para Europa Oriental y Asia Central, ha afirmado:

“Esta sentencia pone de manifiesto la impunidad que rodea el asesinato de Natalia Estemirova y la cínica inacción de las autoridades rusas. En los 12 años transcurridos desde el asesinato de Natalia, no sólo no han identificado y hecho rendir cuentas a los responsables, sino que también han mantenido su silencio y complacencia mientas otros defensores y defensoras de los derechos humanos en Chechenia estaban expuestos a los mismos peligros, eran atacados, amenazados y enjuiciados.”

“Desde 2009, la ofensiva contra los derechos humanos en Chechenia se ha intensificado y la sociedad civil ha sido destruida metódicamente por las autoridades chechenas. Hasta el día de hoy, las y los colegas de Natalia en la ONG Memorial son objeto de amenazas de muerte, detenciones arbitrarias y cárcel, y muchos periodistas y activistas se han visto obligados a exiliarse. Muchas personas han sido víctimas de desaparición forzada. La inacción de las autoridades rusas ha concedido de hecho carta blanca al liderazgo checheno para seguir cometiendo abusos y silenciar a toda persona que se atreva a expresar su opinión.”

“Natalia Estemirova perdió la vida por su incansable trabajo para documentar y denunciar las atroces violaciones de derechos humanos cometidas en Chechenia. Este abyecto y cobarde asesinato debe ser investigado de manera exhaustiva, efectiva e imparcial, y todas las personas implicadas en estos hechos deben ser encontradas y puestas a disposición de la justicia. Hasta que esto ocurra, el Comité de Ministros del Consejo de Europa, la Unión Europea y los socios bilaterales de Rusia deben aprovechar toda oportunidad para obligar a Rusia a aplicar plenamente esta sentencia vinculante. Hasta entonces, esta sentencia vinculante seguirá sin hacer efectivas la justicia y la verdad a las que Natalia Estemirova y su familia tienen derecho.”

Información complementaria

Natalia Estemirova era una destacada defensora de los derechos humanos que trabajaba para la ONG rusa Memorial en Chechenia. Era conocida por investigar la graves violaciones de derechos humanos, entre ellas desapariciones forzadas, ejecuciones extrajudiciales y tortura, cometidas por agentes estatales rusos durante el segundo conflicto de Chechenia, en 1999-2009. Natalia fue objeto de repetidas críticas y amenazas por parte de las autoridades chechenas, incluido el líder checheno designado por el Kremlin, Ramzan Kadyrov. El 15 de julio de 2009, Natalia Estemirova fue secuestradapor hombres armados no identificados en la capital de Chechenia, Grozni, y su cuerpo sin vida fue hallado el mismo día en la vecina Ingusetia. Nadie ha comparecido ante la justicia por su asesinato.

Desde el asesinato de Natalia, periodistas, defensores y defensoras de los derechos humanos y activistas de la sociedad civil de Chechenia siguen siendo hostigados, intimidados, atacados, encarcelados por cargos falsos e incluso asesinados, como la defensora de los derechos humanos Zarema Sadulaeva junto con su esposo Alik Dzhabrailov. Desde entonces se ha informado de numerosos secuestros y homicidios en Chechenia. Muchas personas que han criticado públicamente a las autoridades chechenas han sufrido tortura, desaparición forzada o ejecución extrajudicial. Los autores de estos y otros delitos, incluida la denominada “purga gay”, y de las ejecuciones extrajudiciales masivas cometidas en 2017, han disfrutado de total impunidad.