Lunes, 23 de julio, 2018

El 20 de julio, el gobernador de Ohio conmutó la condena a muerte de Raymond Tibbetts, prevista para el 17 de octubre. Al hacerlo, el gobernador rechazó la recomendación de la junta de libertad condicional, que había votado por 8 votos contra 1 en contra de la clemencia


El 8 de febrero de 2018, cinco días antes de la fecha prevista para que Raymond Tibbetts fuera ejecutado por el asesinato, cometido en 1997, de Fred Hicks, el gobernador de Ohio dictó una suspensión de ocho meses y devolvió el caso a la junta de libertad condicional después de haber recibido una carta en favor de la clemencia enviada por un hombre que había sido jurado en el caso y que, desde entonces, había tenido conocimiento de las circunstancias atenuantes que no se habían presentado en el juicio de 1998. El miembro del jurado escribió que “[b]asándome en lo que hoy sé, no habría recomendado la pena de muerte”. En 2011, un juez federal describió que el abogado encargado de la defensa inicial de Raymond Tibbetts no había “realizado ninguna preparación básica” de las pruebas sobre la traumática infancia de su cliente, y escribió que las pruebas reveladas desde entonces mostraban “un entorno mucho más caótico y abusivo” —tanto en la casa de sus progenitores como en las casas de acogida— del que los miembros del jurado habían escuchado. Esos datos “estremecedores” y “totalmente perturbadores” habrían dado al jurado motivos “convincentes” para votar en favor de la cadena perpetua. En virtud de la ley de Ohio, con que tan sólo un miembro del jurado vote en contra de la pena de muerte, el resultado es la cadena perpetua.

La junta de libertad condicional, que había recomendado en contra de la clemencia en enero de 2017, reconsideró el caso en una vista complementaria el 14 de junio de 2018. El 22 de junio volvió a recomendar en contra de la clemencia, por ocho votos contra uno. La mayoría declaró que dudaba de que el miembro del jurado —que les había dicho que “casi con absoluta certeza” habría votado por la cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional si hubiera sabido lo que sabe ahora— hubiera tomado una decisión diferente en el juicio si se hubieran presentado al jurado las circunstancias atenuantes en cuestión. El miembro del jurado también dijo a la junta que le había “preocupado la respuesta de la fiscalía a la presentación de la defensa y [sentía] que era engañosa”, y que “la fiscalía había sugerido que entrar en una casa de acogida había sido bueno para Tibbetts”, pese a que la información en posesión de la defensa por aquel entonces demostraba lo contrario.

El 20 de julio, el gobernador John Kasich anunció que conmutaba la condena a muerte. Explicó que “la conmutación de Tibbetts se concede a consecuencia de los defectos fundamentales de la fase de determinación de la pena de su juicio. En concreto, el hecho de que la defensa no presentara pruebas atenuantes suficientes, asociado a una inexacta descripción de la infancia de Tibbetts por parte de la fiscalía, impidió esencialmente al jurado tomar una decisión informada sobre si Tibbetts merecía la pena de muerte”.

En Estados Unidos han sido ejecutadas 1.479 personas desde que el país reanudó los homicidios judiciales en 1977 en virtud de las nuevas leyes de pena capital aprobadas por la Corte Suprema en 1976. Ohio ha sido responsable de 56 de estas ejecuciones. En lo que va de año ha habido 14 ejecuciones en Estados Unidos. Amnistía Internacional se opone a la pena de muerte incondicionalmente. En la actualidad hay 142 países abolicionistas en la ley o en la práctica.

 

Índice: AMR 51/8820/2018