Miércoles, 11 de diciembre, 2019

Naseem John, Nida John, Nobil Zain, Sylvester John, Hina Milword y Keshwan Milword, de edades comprendidas entre los 11 y los 57 años, se vieron obligados a huir de Pakistán, donde su vida estaba gravemente amenazada, y buscar un lugar seguro donde vivir en Sri Lanka
 


Una familia católica paquistaní que llegó a Colombo en busca de asilo en julio de 2013, cuando sus vidas estaban amenazadas, regresó discretamente a Pakistán en septiembre. Arrestados tras expirar su visado, los miembros de la familia John estaban detenidos en condiciones deplorables cuando Amnistía Internacional supo que estaba previsto deportarlos inmediatamente de Sri Lanka el 31 de mayo de 2019. Tras los atentados del domingo de Pascua en abril de 2019, turbas violentas desplazaron de su domicilio a la familia junto con otras que solicitaban asilo. Si bien se consiguió detener su deportación, las autoridades srilankesas no les ofrecieron una alternativa segura y la familia se vio obligada a regresar a Pakistán al no poder seguir viviendo en el campo de detención.
 
No se requiere ninguna otra acción. Muchas gracias a todas las personas que enviaron llamamientos.
 
Naseem John, Nida John, Nobil Zain, Sylvester John, Hina Milword y Keshwan Milword, de edades comprendidas entre los 11 y los 57 años, se vieron obligados a huir de Pakistán, donde su vida estaba gravemente amenazada, y buscar un lugar seguro donde vivir en Sri Lanka. Toda la familia fue arrestada en mayo de 2019 por haber vencido sus visados y estuvo detenida en condiciones deplorables mientras esperaba los planes para su deportación inmediata.
Tras la atención mundial que concitó el caso de la familia John, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Sri Lanka detuvo sus planes de deportación. Sin embargo, al no mejorar sus condiciones de vida y carecer de una vía de recurso legal respecto al estado de su solicitud de asilo, y ante el preocupante deterioro de la salud del miembro de más edad de la familia, que no podía acceder a los servicios médicos necesarios, la familia decidió regresar voluntariamente a Pakistán.
 
Tras los letales atentados del domingo de Pascua, en Sri Lanka se hizo más frecuente una actitud de franca hostilidad hacia las personas refugiadas. Turbas de jóvenes, y a veces hombres armados, comenzaron a ir de puerta en puerta en busca de personas refugiadas y solicitantes de asilo de países de mayoría musulmana a las que expulsar de sus hogares. La familia John fue víctima de esta práctica.
 
En los refugios temporales donde los John buscaron seguridad se vivía en condiciones de hacinamiento y antihigiénicas, sin acceso fiable a servicios básicos. Las personas dormían sobre el duro suelo, con una fina lámina de plástico o una sábana bajo el cuerpo y sin espacio siquiera para darse la vuelta. Quienes estaban a la intemperie dormían sobre palés de madera para protegerse del agua de lluvia.
 
La gente comenzó a padecer fiebre, infecciones, enfermedades respiratorias o diarrea, y, especialmente las personas ancianas, hipertensión arterial. No había ningún centro médico adecuado cerca, y las personas refugiadas y solicitantes de asilo no podían aventurarse a salir solas. A Keshwan, el miembro más joven de la familia John, lo mantuvieron aislado de su madre, Hina.
 
 
Nombre y género gramatical preferido: Naseem John (femenino), Nida John (femenino), Nobil Zain (masculino), Sylvester John (masculino), Hina Milword (femenino), Keshwan Milword (masculino).
 
Segunda y última actualización de la AU 80/19