Es preciso incorporar la perspectiva de género para comprender la seguridad humana de manera inclusiva, a fin de hacer propuestas concretas de políticas públicas comprehensivas en sus múltiples componentes, de acuerdo a los grupos de edad, escogencia sexual, etnia, condición social y geográfica, entre otras; respondiendo a las exigencias que cada contexto y sus coyunturas particulares establezcan como prioritarias

El trabajo de investigación titulado “Seguridad Ciudadana y Perspectiva de Género”, de la mano la experta en género y violencia Magaly Huggins, propone que una política efectiva de seguridad ciudadana en Venezuela debe considerar la mirada de género en su construcción y seguimiento, con el fin de que estas visualicen las diferencias de género y apunten a una verdadera igualdad sin discriminación.

“Es preciso incorporar la perspectiva de género para comprender la seguridad humana de manera inclusiva, a fin de hacer propuestas concretas de políticas públicas comprehensivas en sus múltiples componentes, de acuerdo a los grupos de edad, escogencia sexual, etnia, condición social y geográfica, entre otras; respondiendo a las exigencias que cada contexto y sus coyunturas particulares establezcan como prioritarias”, explica Huggins.

Sobre el tema de los feminicidios que ocurren en el país, denunció los altos niveles de impunidad que existen en todos los niveles del Sistema de Justicia, hecho que convierte estos delitos en violación del derecho a la vida por omisión del Estado, al no garantizar el acceso a la justicia y el derecho a la vida.

Con respecto a la situación actual de Emergencia humanitaria Compleja e inseguridad, indica que la mujer es afectada de forma diferenciada en comparación con los hombres. Por ejemplo, la inseguridad alimentaria expone a muchas mujeres a la prostitución y la explotación forzada como única opción de ingreso económico para ellas y sus familias. De igual manera, mujeres en situaciones de vulnerabilidad quedan expuestas al tráfico y trata de personas en intentos por emigrar del país huyendo de la crisis.

Igualmente, la experta indica que la ausencia de métodos de planificación familiar conlleva a embarazos no deseados y la vulneración al derecho de vivir una sexualidad libre y responsable, situación que puede ser considerada como una forma de violencia que afecta los derechos sexuales y reproductivos de la mujer.

Destaca el rol de las mujeres –madres, esposas o compañeras, hijas y otras mujeres de la familia- como víctimas secundarias de la violencia armada que afecta en mayor medida a los hombres en Venezuela. “Son las mujeres las que quedan a la cabeza de las familias luego de la muerte de las víctimas de la violencia armada o policial”.

“Seguridad Ciudadana y Perspectiva de Género” es la quinta publicación del proyecto de Seguridad Ciudadana de Amnistía Internacional Venezuela. Para profundizar más en la materia, haga click aquí para ver documento online.

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