Miércoles, 29 de mayo, 2019

El 28 de mayo, la organización periodística Disclose reveló que, según sus fuentes, el Bahri Tabuk tenía previsto cargar en Francia municiones para los obuses Caesar que se iban a vender a Arabia Saudí, de conformidad con lo estipulado en el contrato OASIS 6


Amnistía Internacional ha alertado hoy de la necesidad de detener en Francia, a su paso por el puerto de Marsella-Fos, un carguero saudí que, al parecer, transporta vehículos blindados canadienses a Arabia Saudí.
 
La organización ha advertido del grave peligro de que el material que transporta el Bahri Tabuk sea utilizado por las fuerzas armadas saudíes para cometer crímenes de guerra y otros abusos en Yemen, y ha afirmado que existen motivos fundados para temer que, en el puerto de Marsella-Fos, se carguen también municiones francesas destinadas a Arabia Saudí.
 
Según se puede comprobar en la agenda de la empresa de transporte marítimo Bahri, el Bahri Tabuk tenía previsto viajar a Génova tras haberse recalado en Canadá, pero al final fue dirigido a Marsella.
 
Los días 9 y 10 de mayo, gracias a las acciones legales emprendidas por ONG francesas y al escrutinio de la opinión pública, se impidió atracar en el puerto de Le Havre a otro carguero saudí, el Bahri Yanbu, que se disponía a recoger allí un cargamento de armas francesas.
 
“Tenemos motivos para temer que el cargamento de armas que no pudo recoger el Bahri Yanbu sea recogido ahora por el Bahri Tabuk,” ha afirmado Aymeric Elluin, responsable del trabajo de incidencia de Amnistía Internacional Francia sobre armamento.
 
“Es preciso impedir que este barco de la vergüenza recoja esos peligrosos cargamentos de armas francesas y que lleve, además, a Arabia Saudí armas de otros países, como Canadá. La llegada del Bahri Tabuk pone de nuevo a prueba la voluntad de Francia de respetar las obligaciones que ha contraído en virtud del Tratado sobre el Comercio de Armas y de la posición común de la Unión Europea sobre el control del corretaje de armas".
 
Como país signatario de ambos instrumentos, Francia debe impedir el tránsito de una embarcación si existe un peligro grave o manifiesto de que las armas que transporta sean utilizadas para cometer o facilitar abusos, como, por ejemplo, crímenes de guerra.
 
Armas francesas para Arabia Saudí
 
El 28 de mayo, la organización periodística Disclose reveló que, según sus fuentes, el Bahri Tabuk tenía previsto cargar en Francia municiones para los obuses Caesar que se iban a vender a Arabia Saudí, de conformidad con lo estipulado en el contrato OASIS 6. De cumplirse esta afirmación, el cargamento contravendría el artículo 6.3 del Tratado sobre el Comercio de Armas, según el cual no debe autorizarse ninguna transferencia si existe el riesgo de que el material en cuestión sea utilizado para cometer violaciones de derechos humanos, incluidos crímenes de guerra.
 
Francia es uno de los muchos Estados Partes en el Tratado sobre el Comercio de Armas que continúan suministrando armas a Arabia Saudí, pese al peligro real de que se utilicen para cometer crímenes de guerra en Yemen. Al continuar suministrando armas a Arabia Saudí, Francia está incumpliendo abiertamente sus obligaciones internacionales.
 
Según un análisis reciente del Observatoire économique de la défense(observatorio económico de la defensa), las exportaciones de armas francesas crecieron en 2018, debido, sobre todo, a la entrega de vehículos blindados a Arabia Saudí. Se trata, específicamente, de vehículos blindados de combate VAB MAK3, construidos por Arquus, y dotados de torretas ARX25 de calibre medio, fabricadas por Nexter.
 
Vehículos blindados canadienses
 
El 17 de mayo, el Bahri Tabuk zarpó el puerto de Saint John, en Canadá. Según testimonios fidedignos y fotografías obtenidas por Amnistía Internacional es muy probable que, a bordo. transporte un cargamento de vehículos blindados ligeros de fabricación canadiense destinados a Arabia Saudí. Previamente, Amnistía Internacional había conseguido confirmar que el primer barco, el Bahri Yanbu, había transportado a Arabia Saudí vehículos blindados canadienses durante un viaje realizado en octubre de 2018.
 
Varios medios de comunicación canadienses han divulgado imágenes publicadas en las redes sociales por miembros de la Guardia Nacional saudí, que parecen confirmar la presencia de esos vehículos blindados, hace unos meses, en la inestable frontera saudí con Yemen. Amnistía Internacional no ha podido verificar este extremo.
 
Amnistía Internacional insta a Canadá —país que en la actualidad está siguiendo el proceso de adhesión al Tratado sobre el Comercio de Armas— a armonizar su legislación con las obligaciones dimanantes de ese tratado para poner fin a este tipo de exportaciones.
 
Tanto Amnistía Internacional como sus organizaciones asociadas seguirán supervisando de cerca los movimientos de cualquier embarcación saudí sospechosa de transportar material militar, y denunciarán a los Estados que incumplan sus obligaciones jurídicas internacionales.
 
Información complementaria
  • La empresa saudí Bahri había firmado un contrato de cinco años (de 2014 a 2019) con el Ministerio de Defensa de Arabia Saudí, por el que se hizo con la exclusividad en el transporte de armas de guerra adquiridas por Arabia Saudí en el extranjero y en el transporte de las fuerzas armadas saudíes por tierra, mar y aire hasta la fecha de vencimiento del contrato.
  • En el momento de redactar el presente comunicado de prensa, la DGSI (Dirección General de Seguridad Interna) había interrogado ya a siete periodistas que intervinieron en su momento en la revelación de los “papeles de Yemen”. Estos interrogatorios formaban parte de la investigación preliminar abierta por la Fiscalía de París, en respuesta a una denuncia presentada por la ministra del Ejército, que acusaba a dicho grupo de periodistas de “haber puesto en peligro la defensa nacional”. Amnistía Internacional ha publicado una Acción Urgente en su defensa.
  • En 2014, Canadá firmó el contrato de armamento con Arabia Saudí más importante de su historia, que fue aprobado en 2016 por el gobierno de Justin Trudeau. Este contrato contempla la exportación de vehículos blindados de combate por valor de 14.000 millones de dólares canadienses. En concreto, incluye la entrega de 928 vehículos blindados ligeros LAV 6 construidos por General Dynamics Land Systems (Ontario). Desde entonces, Amnistía Internacional Canadá y una coalición de ONG se han movilizado para detener esta entrega.