Jueves, 12 de marzo, 2020
Alexsayder Castellanos

“Las situaciones de riesgo de la migración se explican en las comunidades, pero las personas continúan huyendo del país. Es decir, no evitamos el fenómeno migratorio venezolano, pero con nuestra sensibilización procuramos que tengan menor condición de vulnerabilidad, al menos por la desinformación”, ha dicho Dorennys Ángulo, directora de la asociación civil Éxodo


Por: Alexsayder Castellanos

En Venezuela, la movilidad humana ha tomado gran relevancia debido a la constante y creciente cantidad de personas que se trasladan fuera del país, en ejercicio de su derecho a la libre circulación. Justamente, es en este contexto donde existen mayores vulnerabilidades de caer en organizaciones delictivas dedicadas a la trata de personas, prostitución forzada y la esclavitud sexual, por lo que es necesario que las organizaciones de la sociedad civil dedicadas a la prevención de la violencia hacia las mujeres tengan un adecuado acompañamiento a víctimas, en especial, de estos tipos de violencia que han tenido impacto en la población femenina.

Entre las ONG locales está Éxodo Venezuela, la cual se caracteriza por plantear un enfoque de diferenciación al momento de visibilizar violaciones a derechos humanos. “Las tres formas de violencia como prostitución forzada, esclavitud sexual y trata de personas, están tipificadas en la Ley sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia de 2007”, así lo indicó Dorennys Ángulo, directora de la asociación civil.

La abogada lamentó, además que, en el país actualmente existen avances en políticas, análisis y respuestas de estos delitos. Sin embargo, continúan presentándose más casos por el contexto de la migración forzada.

Lucha de género

En relación al proyecto “Mujeres, adolescentes y niñas en el contexto migratorio venezolano” de la asociación civil Éxodo, la directora precisó que la esclavitud y extorsión sexual son una de las principales vulneraciones que experimentan las migrantes durante su proceso. De acuerdo con la organización, las personas migrantes irregulares están en mayor riesgo de ser víctimas de la trata de personas.

“Mientras la mujer esté indocumentada o en condiciones irregulares es vista como un objeto de intercambio, es decir, su cuerpo es abusado sexualmente como forma de pago para continuar el trayecto a su destino. Situación que afecta no solo a las migrantes sino a todas las mujeres porque esto da menor valor y dignidad al género”.

Por ello, la defensora indicó que las venezolanas cuando van a emigrar suelen hacerlo en grupo, esto con el propósito de establecer un mecanismo de protección en caso de presentarse cualquier situación de vulnerabilidad. “Si las atacan en el camino, al menos una de ellas puede gritar o correr para luego contar lo que sucedió y así los cuerpos de seguridad tomen sus medidas”, explicó.

En este sentido, Éxodo Venezuela señaló que existen tres formas de explotación de género que se impulsan en situaciones de crisis como la esclavitud sexual, prostitución forzada y la trata de personas.

“Las situaciones de riesgo de la migración se explican en las comunidades, pero las personas continúan huyendo del país. Es decir, no evitamos el fenómeno migratorio venezolano, pero con nuestra sensibilización procuramos que tengan menor condición de vulnerabilidad, al menos por la desinformación”, expresó.

En su mismo proyecto, detalla que la mayoría de víctimas del delito de trata de personas son mujeres, adolescentes y niñas, constituyéndose en una de las formas de violencia de género más desarrolladas por el crimen organizado, en la modalidad de prostitución forzada y otras formas de explotación sexual.

“Desde Éxodo Venezuela pretendemos que las víctimas se sientan más escuchadas y protegidas. Que cuenten lo que ocurre y así tengan un proceso de auto reconocimiento de su situación de vulnerabilidad”, enfatizó.

Identificación de delito

En sus informes de investigación presentan desde un diagnóstico de la situación hasta unas recomendaciones a políticas públicas. “Entendemos que algunas de nuestras recomendamos son más costosas para implementar que otras, por lo que estamos conscientes de los retos que plantean. Sin embargo, aconsejamos que existan investigaciones que den explicación y motivos del fenómeno que se está presentando, esto con el fin de lograr disminuir las causas que lo provocan”, así lo manifestó la directora de Éxodo.

De hecho, en 2019 reforzaron los conocimientos del personal de organizaciones de la sociedad civil que hacen labores en los estados Anzoátegui, Bolívar, Táchira y Zulia; durante el levantamiento de información del informe anual, con el propósito de capacitar sobre la atención que requieren las víctimas de la trata.

La organización civil, además, ha formado a cuerpos de seguridad y a fiscales del Ministerio Público en el área Metropolitana de Caracas, Vargas, Sucre y Bolívar, sobre la identificación del delito, obteniendo como resultado la creación de dos fiscalías especializadas en materia de trata. Según Angulo, esta es una medida que representa un avance hacia una política pública más coherente con la atención de las víctimas.

“Hemos evidenciado en los últimos años casos que han tenido connotación en el ámbito nacional como el naufragio en la localidad de Güiria, en el estado Sucre, que zarpó a Trinidad y Tobago. Además, del otro presunto segundo caso de naufragio en la misma entidad. De estos hechos, el Ministerio Público abrió investigaciones para identificar a los responsables de estas desapariciones”, indicó.

Consciencia civil y estatal

“Es importante hablar de la trata de personas para hacer mayor prevención”, destacó. Por ello, su labor también llega a las comunidades del país, a través de charlas que nos permite escuchar las necesidades de esa población y luego dar a conocer sus derechos. Para Angulo, las campañas de capacitación y sensibilización que realizan hacia la ciudadanía los convierte en innovadores en sus movimientos.

De acuerdo con la directora de la ONG, hoy día existe un mayor nivel de conciencia o conocimiento de las personas hacia este delito, pero no continúan viéndose como potenciales víctimas de la trata aun cuando van a emigrar o viajar a otro país. “En los últimos años, hemos trabajado en las universidades del país para llegar a la mayor cantidad de jóvenes, puesto que es la población más susceptible a la realidad de la trata”.

En relación a los compromisos que tienen los Estados receptores hacia las mujeres migrantes que salen de Venezuela por el contexto de crisis, la abogada dijo que “van en búsqueda de empleo y de oportunidades para ganarse la vida”. Por lo que recomienda a los gobiernos tener políticas públicas más coherente con los derechos humanos y vean en la migración venezolana más oportunidades que amenazas.

“Se necesita dar una atención a largo plazo a las personas en estos estatus, debido a que es una cifra que cada año aumenta, por lo que requiere soluciones a largo plazo no las de uno o dos años, que son las temporales”.

Movilidad humana segura o peligrosa

La asociación civil Éxodo tiene líneas de acción que se dedican a investigar, asesorar, sensibilizar y formar a la población en materia de movilidad humana en contextos seguros, junto a un enfoque de derechos humanos, de género e interseccionalidad.

Una movilidad segura y voluntaria incluye el acceso a la documentación de manera eficaz, accesible y posible. Por ende, la migración en condiciones inseguras sucede tanto por los altos costos que requiere el venezolano para la renovación de su pasaporte como los visados que numerosos Estados exigen para el ingreso de la población.

Según el reciente informe anual 2019 de Amnistía Internacional, el número de hombres, mujeres, niños y niñas que ha huido de la crisis de derechos humanos en Venezuela en los últimos años ascendió a casi 4,8 millones, pero gobiernos receptores como Perú, Ecuador y Chile respondieron imponiendo nuevos y restrictivos requisitos de entrada y devolviendo ilícitamente a personas que buscaban ejercer su derecho a solicitar protección internacional, sea en virtud de la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados, de ámbito internacional, o de la Declaración de Cartagena, de ámbito regional.

Éxodo detalló que la movilidad voluntaria puede estar motivada por diversas razones, turismo, reunificación familiar, búsqueda de mejores condiciones económicas, laborales, profesionales, siendo aquella que se realiza desde la satisfacción de los derechos humanos y las necesidades básicas. Lo contrario a esto ocurre en el momento en que la persona huye de su país porque las crisis de Derechos Económicos, Sociales, Culturales y Ambientales (DESCA) designó un cambio traumático en su vida o salud.

Para Angulo, las personas que escapan de Venezuela caminando pueden resultar con condiciones de salubridad más precarias al momento de cumplir con el trayecto a su destino. “Con el gran peligro que se corre, la persona no está segura de que llegará a su destino, la roben o desaparezcan del camino”.

Convenios de protección internacional

La Agencia de la Organización de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) calcularon más de cuatro millones de migrantes y refugiados venezolanos en el mundo.

“Los migrantes no tienen derechos humanos adicionales a los que tiene cualquier ser humano, pero si tienen especificaciones que están previstas en los pactos internacionales sobre todo lo que tiene que ver al acceso al empleo, educación y salud. Entonces, estos estándares deben ser garantizados tanto a su población como a la extranjera”, así lo indicó Dorennys Angulo, directora de la asociación civil Éxodo.

De hecho, en el logotipo de la ONG están los cinco continentes del mundo (Asia, América, África, Europa e Oceanía) donde hay venezolanos en estatus de migrantes. “Quizás en eso fuimos visionarios porque pensábamos trabajar con la migración de otras fronteras y no con la de nuestro país”.

En este sentido en diciembre de 2019, la ACNUR implementó el Plan de Respuesta Regional Humanitario para Refugiados y Migrantes (RMRP), que aunque por el momento está financiado solo en un 21%, está dirigido a atender en 16 país a 2,2 millones de venezolanos y 580.000 personas en comunidades de acogida.

El Pacto Mundial para la Migración Segura, Ordenada y Regular, acordado por todos los Estados miembros de la ONU, es para ayudar a aprovechar los beneficios de la migración y proteger a los inmigrantes indocumentados. Además, se intenta gestionar los flujos migratorios de forma integral y a escala internacional. 

“Está la convención internacional sobre la protección de los derechos de todos los trabajadores migratorios y de sus familiares. Además, el Comité de la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) tiene recomendaciones para las trabajadoras migrantes”, acotó.