Lunes, 28 de septiembre, 2020

Según defensores y defensoras de los derechos humanos de Azerbaiyán, en la actualidad un centenar de personas permanecen en prisión o privadas de libertad tras haber sido detenidas por cargos de motivación política. Esta práctica repercute en toda la sociedad civil azerbaiyana y crea un clima de miedo y autocensura


El 3 de septiembre, Tofig Yagublu, periodista azerbaiyano y político de la oposición, fue condenado a cuatro años y tres meses de prisión por cargos falsos. Como protesta, inició una huelga de hambre y, el 12 de septiembre, fue trasladado desde un centro de detención al hospital por el deterioro de su estado de salud. El 18 de septiembre, el tribunal de apelación de Bakú resolvió su arresto domiciliario en espera de la vista de apelación. TofigYagublu es un preso de conciencia y debe anularse su condena.

Actúen: Redacten su propio llamamiento o utilicen esta carta modelo 

Ilham Aliyev

Presidente de Azerbaiyán / President of Azerbaijan

19 Istiqlaliyyat Street Baku AZ1066, Azerbaiyán

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Señor Presidente:

Le escribo para expresarle mi honda preocupación por la condena impuesta a TofigYagublu, periodista y destacado político de la oposición de Azerbaiyán, tras un juicio sin las debidas garantías. TofigYagublu fue detenido en Bakú, el 22 de marzo, tras un accidente de automóvil en el que estuvo implicado. Al día siguiente, el tribunal de Bakú lo recluyó en prisión por cargos falsos de vandalismo. Tras un juicio de motivación política, el 3 de septiembre fue declarado culpable y condenado a cuatro años y tres meses de prisión.

TofigYagoublu se declaró en huelga de hambre el 2 de septiembre como protesta por su procesamiento infundado. Su estado de salud se ha deteriorado a consecuencia de la huelga de hambre y, el 12 de septiembre, tuvo que ser trasladado al hospital. El 18 de septiembre, el tribunal de apelación de Bakú resolvió su arresto domiciliario en espera de la vista de apelación.

Amnistía Internacional lo considera preso de conciencia, recluido únicamente por ejercer sus derechos humanos.

En vista de lo anterior, lo insto a adoptar todas las medidas necesarias para garantizar:

  • que TofigYagublu es puesto en libertad de inmediato y sin condiciones;
  • que se pone fin a su persecución y la de otros activistas políticos y de la sociedad civil, y que todas las personas en Azerbaiyán pueden disfrutar plenamente de sus derechos humanos, que incluyen los derechos a la libertad de expresión y reunión pacífica.

Atentamente,
[NOMBRE]

Información complementaria

TofigYagublu, periodista y destacado miembro del partido de oposición Musavat, ha sufrido años de acoso por su activismo pacífico.

Fue detenido por primera vez en 2013, tras viajar a la ciudad de Ismayili, en el norte de Azerbaiyán, los días 23 y 24 de enero de ese año, para observar las manifestaciones y disturbios que estaban teniendo lugar allí en aquellos momentos. En marzo de 2014, tras un juicio injusto por cargos de motivación política, el Tribunal de Delitos Graves de Shaki lo declaró culpable de incitar a la violencia colectiva y lo condenó a cinco años de prisión. Amnistía Internacional reconoció a TofigYagublu como preso de conciencia.

El 5 de noviembre de 2015, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos resolvió que, al privar a TofigYagublu de su libertad sin que existiera sospecha razonable de que hubiera cometido un delito, Azerbaiyán había violado los derechos que le otorga el artículo 5 (Derecho a la libertad y a la seguridad) del Convenio Europeo de Derechos Humanos (Yagublu v. Azerbaijan, solicitud núm. 31709/13). TofigYagublu fue puesto en libertad en marzo de 2016 en virtud de un indulto presidencial tras haber pasado más de tres años en prisión.

En octubre de 2019 estuvo en detención administrativa durante 30 días, supuestamente por desobedecer las órdenes policiales durante una concentración pacífica de protesta que la policía dispersó brutalmente. TofigYagublu denunció que había sido sometido a tortura y otros malos tratos mientras estuvo bajo custodia, pero sus denuncias nunca se han investigado de manera efectiva.

Amnistía Internacional lleva años documentando violaciones de derechos humanos en Azerbaiyán. Los derechos a la libertad de expresión, asociación y reunión pacífica se han visto muy restringidos, y muchos periodistas, defensores y defensoras de los derechos humanos y otros activistas han sufrido hostigamiento y procesamientos por cargos falsos y han sido encarcelados tras juicios sin garantías. Según defensores y defensoras de los derechos humanos de Azerbaiyán, en la actualidad un centenar de personas permanecen en prisión o privadas de libertad tras haber sido detenidas por cargos de motivación política. Esta práctica repercute en toda la sociedad civil azerbaiyana y crea un clima de miedo y autocensura. Mientras continúan las detenciones y los enjuiciamientos por motivos políticos de personas críticas con el gobierno, Azerbaiyán sigue impidiendo el escrutinio de la situación de los derechos humanos. Además, desde hace varios años se niega la entrada en el país a los observadores internacionales de derechos humanos, incluida Amnistía Internacional.

Pueden escribir llamamientos en: Azerí, inglés, ruso. También pueden escribir en su propio idioma.

Envíen llamamientos lo antes posible y no más tarde del: 20 de noviembre de 2020

Consulten con la oficina de Amnistía Internacional de su país si desean enviar llamamientos después de la fecha indicada.

Nombre y género gramatical preferido: TofigYagublu(masculino)

Enlace a la au anterior: https://www.amnesty.org/es/documents/EUR55/2029/2020/es/