Lunes, 16 de noviembre, 2020

Ya es hora de acabar con este reinado del terror y desenmascarar a los responsables de estos delitos. De no ser así, las fuerzas de seguridad bajo el mando del presidente Alexander Lukashenko seguirán desplegando las tácticas más terribles de represión —la tortura despiadada e incluso el asesinato— contra su propia ciudadanía

 


En reacción a la muerte en Minsk del artista Raman Bandarenka, brutalmente golpeado por unos hombres enmascarados y llevado después bajo custodia policial, la directora de Amnistía Internacional para Europa Oriental y Asia Central, Marie Struthers, ha declarado:

“Las autoridades de Bielorrusia, que siguen gobernando mediante el terror, sometiendo a las voces disidentes a la violencia y el encarcelamiento, deben abrir sin demora una investigación minuciosa, imparcial e independiente sobre la muerte de Raman Bandarenka y hacer rendir cuentas a sus autores en juicios con las debidas garantías, en lugar de intentar eludir su responsabilidad alegando que Raman Bandarenka fue golpeado por ‘ciudadanos preocupados’.

“Prácticamente no hay ninguna duda de que Raman Bandarenka fue golpeado por agentes de las fuerzas de seguridad, como ha ocurrido con cientos de personas que han sido agredidas por el mero hecho de levantar sus voces para protestar pacíficamente. En lugar de trasladarlo al hospital, la policía lo arrestó y se lo llevó bajo custodia. No está claro lo que sucedió mientras estuvo bajo custodia policial, pero murió en el hospital al día siguiente.

“Ya es hora de acabar con este reinado del terror y desenmascarar a los responsables de estos delitos. De no ser así, las fuerzas de seguridad bajo el mando del presidente Alexander Lukashenko seguirán desplegando las tácticas más terribles de represión —la tortura despiadada e incluso el asesinato— contra su propia ciudadanía.”

Información complementaria

Raman Bandarenka, artista de 31 años residente en la capital de Bielorrusia, Minsk, murió en el hospital la noche del 12 de noviembre. Según informan los medios de comunicación, unos hombres enmascarados sin identificar que habían ido a su barrio para retirar banderas y lazos de protesta le dieron una paliza tras discutir con él, y después la policía se lo llevó en una furgoneta.

Horas más tarde, Raman Bandarenka fue trasladado al hospital, donde ingresó inconsciente, con heridas en la cabeza y colapso pulmonar, y no se pudo hacer nada por salvarlo. La portavoz de la policía de Minsk, Volha Chamadanava, dijo que el incidente había sido “una pelea”, y añadió que en ocasiones “hay ciudadanos preocupados que intentan restaurar el orden”. Las autoridades se refieren sistemáticamente a las protestas pacíficas en Bielorrusia como “guerra” y “conflicto” orquestado desde el extranjero.

En los últimos meses, las autoridades bielorrusas han soltado bandas de hombres enmascarados vestidos de civil que atacan a personas que protestan pacíficamente. La opinión general (a menudo confirmada) es que estas bandas están formadas por agentes de seguridad, pero ninguno de sus integrantes ha sido oficialmente identificado ni procesado.